sábado, 6 de diciembre de 2008

OCTOBER por Julia Ramírez Blanco

En 1986, los entonces editores de October (Rosalind Krauss, Annete Michelson y Joan Copjec) declaraban retrospectivamente que cuando fundaron su revista deseaban “proclamar que el constructivismo –abortado por el stalinismo, distorsionado por la recuperación de la vanguardia soviética en el mainstream de los ideales estéticos de Occidente- fuese reconsiderado por las prácticas artísticas actuales. Fundamos October como foro para la presentación y elaboración teórica de un trabajo cultural que contiene el no acabado proyecto de los sesenta”. El título, por tanto, se refiere muy plausiblemente a la revolución rusa del llamado Octubre Rojo.

La famosa revista parte de 1976, cuando Rosalind Krauss y Annete Michelson decidieron desmarcarse de Artforum y crear una publicación propia, que constaría de cuatro números anuales publicados por el M.I.T. (Massachussetts Institute of Technology). Krauss y Michelson fueron las dos primeras personas en un grupo editorial que ha ido variando en los 32 años de andadura de October, hasta llegar a los diez editores del último número (Rosalind Krauss, Annette Michelson, George Baker, Yve-Alain Bois, Benjamín H. D. Buchloh, Hal Foster, Denis Hollier, Carrie Lambert-Beatty, Mignon Nixon y Malcolm Turvey). Desde el principio October declaraba tratar no sólo sobre arte y teoría, sino también sobre crítica y política, algo que se ha mantenido hasta hoy, con 125 números publicados.

Esta larga trayectoria, durante la cual se ha mantenido una gran repercusión, se explica por la personalidad de los autores. En torno a esta publicación se ha formado un influyente grupo de intelectuales que tuvieron su principal tribuna en las páginas de la revista. Con el tiempo, éstos se han erigido en importantísimas figuras de la teoría del arte contemporáneo, con figuras como Hal Foster, Rosalind Krauss, Yve-Alain Bois o Benjamín H. D. Buchloh, formados todos ellos en un formalismo del que pasaron a ser disidentes. Con las bases teóricas el post estructuralismo, la semiótica, el marxismo y el psicoanálisis, se configura desde October una coherente teoría de la posmodernidad.
La revista es una publicación especializada, organizada como una sucesión de artículos científicos de cierta extensión. No se ocupa por tanto de la más estricta actualidad, sino que se trata más bien de un espacio para la reflexión teórica. La austera estética en blanco y negro recuerda algo a las revistas de vanguardia clásicas, como por ejemplo La Révolution Surrealiste, un parecido que quizás sea intencionado en unos autores que mostraron renovado interés por el surrealismo. La escasa publicidad se concentra en las últimas páginas, sin interferir en los contenidos, y suele ser de otras publicaciones o eventos relacionados con el arte.

La frecuente publicación de números temáticos resulta de gran interés para ahondar en ciertos temas. Destacaremos sólo dos de ellos.

El número 43, dedicado exclusivamente al SIDA fue uno de los números más importantes. Editado por Douglas Crimp, que era desde 1977 uno de los editores de October, pretende realizar desde el mundo de la cultura un análisis y una crítica de las cuestiones que rodean esta enfermedad. Asuntos como la iconografía del SIDA, la homofobia, el neo-puritanismo o la discriminación social son abordados por expertos de distintos campos, en un discurso combativo y valiente. Según el propio Crimp, éste fue el número “más largo y exitoso”. El ejemplar fue un hito político de gran proyección en la sociedad. Sin embargo, a nivel interno marcó un punto de inflexión que selló las diferencias de este pensador con sus compañeros editores (Krauss y Michelson),que estaban en desacuerdo con los planteamientos de este “especial” pues, según relata Crimp, no les parecía que cumpliese con la “sofisticación teórica” defendida por October. Tres años después, Douglas Crimp dimitiría, en la más fuerte ruptura interna del Grupo October.

De muy reciente publicación otro número temático a subrayar sería el 123 (divulgado en invierno del 2008), sobre la respuesta del mundo artístico e intelectual ante la guerra de Irak. En este número, editado por Benjamín H. D. Buchloh, numerosas personalidades del mundo de la cultura responden a un mismo cuestionario, ideado por el propio Buchloh, siendo algunos de los entrevistados Okwui Enwezor, Hans Haacke, Lucy R. Lippard o Raymond Pettibon. Aunque el abordaje de la cuestión llega tarde, como señalará Haacke en su respuesta a las preguntas, ello no quita que éstas sean altamente interesantes.

Para observar el estado actual de la publicación resulta quizás útil ver la temática de los números que siguieron a éste, los otros dos años publicados en 2008. Éstos han tratado del arte de Posguerra Italiano (nº 124), y la televisión internacional (nº 125), mientras que está ya anunciado un próximo número 126 que tratará cuestiones diversas, entre las que destacan quizás una revisión de la Internacional Situacionista y una reflexión sobre el asunto de la autoría y los Creative Commons.

Sin embargo más allá de la revista, la gran importancia de October consiste en haber fundado una escuela de pensamiento. La reciente publicación del manual Arte desde 1900, donde colaboran Rosalind Krauss, Hal Foster, Benjamín H. D. Buchloh e Yve-Alain Bois, no es más que un ejemplo de ello. Anteriormente, ya se habían publicado libros de gran repercusión, reuniendo diversos artículos que cada autor había publicado en October, como La Originalidad de la Vanguardia y otros mitos modernos, de Krauss. Diversas mesas redondas para reconducir la teorización a asuntos concretos y hacerla así más accesible han ido celebrándose desde mediados de los noventa, dando así la respuesta del grupo a numerosos temas de actualidad.

1 comentario:

olivia dijo...

¡Genial! Rosalind es sumamente interesante .... por cierto gracias por la info.. ¿Sabes en donde la puedo encontrar online? (la revista)